Integración es la palabra que mejor define la línea arquitectónica de José Roberto Paredes. Con una actitud clara ante el espacio como zona de desarrollo de la vida, propone estructuras habitacionales que vuelven a los orígenes de la humanidad y a entender la casa como el territorio mismo de crecimiento de la familia. Por tanto la intervención del espacio da protagonismo a la geografía natural en la que radica la residencia y hace que los ambientes de la misma programen un feliz encuentro con su entorno natural.

La pasión por la arquitectura le viene de su padre, pero fueron una conferencia de un reconocido arquitecto y el contacto con esta disciplina en la universidad las experiencias que lo llevaron a dedicarse a la arquitectura. Si bien se siente influido por grandes, como Le Corbusier, reconoce y admira a creadores contemporáneos como Toyo Ito, Frank Ghery y Shujei Endo.

“Lo que más disfruto es entender a las personas para quienes diseño”